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miércoles, 30 de octubre de 2019

Mensaje de Yeshua El legado de mis Apóstoles






Mensaje de Yeshua





El legado de mis Apóstoles

Amados hermanos,  soy Yeshua,  vuestro,  maestro y amigo, vengo hoy ,  hablaros,  más que nunca,  a recordarles el legado  que os he dejado,  en  vuestros recuerdos,  de nuestro peregrinar por aquellas tierras de Galilea y Judea.
Muchos de vosotros estáis aquí y ahora, en  otros vehículos humanos, caminando nuevamente junto a mí, pues vuestras esencias,  os han  llamado,  a ser  testigos, otra vez, de mis enseñanzas, como así lo ha hecho, también  mi amada iniciada María Magdalena,  María de Magdala, amada mía, mi más preciada compañera, fiel testigo y enviada por mi Padre,  para haceros recordar,  la única verdad, el secreto , MI PRESENCIA MORA EN  VOSOTROS, HABITA EN  VOSOTROS,  CONFIAD mis apóstoles amados, COMO MI AMADA ,  TAMBIEN  HA  CONFIADO,  Y OS HA GUIADO, a reconoceros como seres inmaculados.
Os hablo a vosotros, mis apóstoles,  mis benditos y amados hermanos,  que estáis aquí y ahora,  de regreso, OS LLAMO , OS RUEGO, BUSCAD EL SILENCIO,   como os he enseñado,  ese silencio sublime,  ese estado de gracia, ese instante santo, junto a mí,  junto a mi Padre,  y junto a mi amada  María Magdalena.
Invocadme, os estoy esperando, por ese amor eterno,  que os guardo en  mi corazón,  y en  el de mi amada compañera.
Vosotros,  tenéis,  un  nuevo legado para ofrecer a la humanidad,  DECIR LA VERDAD.
Os llamo, ASI COMO LO HICIERA A UNO POR UNO, SEGUIDME, dejad todo,  y seguidme.
Vosotros sois mi  familia, os llamo a la UNIDAD,  os llamo a congregaros nuevamente, como esa comunidad que una vez fuimos.
Os amo a todos,  por igual,  cada uno ,  tenéis  una misión  aquí y ahora,  llevad la palabra hablada,  juntaros  nuevamente,  que el Espíritu de mi Padre, llegara a vosotros,  como os he prometido.
Seréis iluminados,  y os daréis cuenta,  porque las señales de mi Padre,  se manifestaran y se anunciaran  en  vuestros cielos, como lo ha hecho siempre.
Mis amados apóstoles,  vosotros lleváis un  sello,  el sello de la familia de David,  que está impreso en  vuestra esencias divinas,  y os reconoceréis  con  solo sentir ese gozo divino en  vuestro corazón.
 Os quiero de regreso,  os aguardo con ternura,  os añoro, porque ya habéis entregado vuestras  vidas  por seguidme.
YO SOY,  vuestro hermano, Yo soy en  vosotros,  ahora y siempre.
Os ama Yeshua.

Santa Madre Ana
30-10-2019