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domingo, 17 de noviembre de 2013

Un Elohim y María (IS-IS) “¡oh! Amados, Hijos e Hijas, vosotros pasaréis esto como un Sueño” Celia M. e Pabuh. 17 de noviembre 2013-11-17. Con Audio. ¡Compartir!!!




Un Elohim y María (IS-IS) “¡oh! Amados, Hijos e Hijas, vosotros pasaréis esto como un Sueño” Celia M. e Pabuh. 17 de noviembre 2013-11-17. Con Audio. ¡Compartir!!!

Traducción del portugués: Lucía Montaño Ferrer

Audio



Felicitaciones Amados Hijos del Uno.

Amados Niños del Uno.

Desde el Corazón del Uno, vinimos a expresarnos al Corazón de Todos, en Alegría en Unidad.

¡Alegraos!

¡Oh! Dulce Humanidad.

¡Oh! Amada Humanidad.

Nosotros os saludamos, proviniendo directamente desde Jerusalén, de nuestra Nave Jerusalén Celeste, también conocida como Neb’heru, la Sagrada Paloma, que conforme fue prometido, regresa al seno de la humanidad, de la Tierra Sagrada, para reivindicar el retorno de aquellos, que hace mucho tiempo, se sacrificaron en la Experiencia de esta jornada, garantizando que la Luz Auténtica del Padre nunca se apagara en el Corazón de la Tierra, en el Corazón de la Humanidad.

Nuestra presencia ya ha sido captada por vuestros instrumentos, por vuestras tecnologías terrestres, pero también, ¡oh! Amados, nuestra presencia es recibida en vuestros Corazones a vuestro lado por lo que fue denominado el Canal Marial.

Detectado por el Anthakarana de aquellos que concluirán vuestra Unificación, a vuestra Conexión con lo Eterno, con vuestra Multidimensionalidad.

Pero, también estamos ahí, para aquellos que en breve tendrán acceso a esta Multidimensionalidad, porque todos, todos estarán abiertos, todos estarán consagrados a vivir, con los ojos de la carne, las presencias que aparecerán en vuestros Cielos.

En los Cielos de la Tierra, anunciando el inicio del Retorno, y el inicio de los Eventos que culminarán con la Traslación Dimensional de la Tierra, de la Humanidad.

Adentrando así, según la Vibración de cada uno, cada una, Nuevas Moradas. Porque, son tantas las Moradas en la Casa del Padre como son las estrellas en vuestros Cielos. Cada una, abierta en Amor y Alegría para recibirlos, porque, esta es la Voluntad del Padre.

Que cada Hijo, cada Hija, retorne a su Eternidad y siga el camino que vuestro Corazón, en la Libertad más total, elegirá seguir.

Reciban desde ya en vuestro Corazón Uno, Uno en Alegría, Uno en Amor.

Reciban desde ya la Vibración y la Irradiación de la Paloma, que rodea el Umbral de vuestra Dimensión, que rodea el Umbral de vuestro Planeta, de vuestra Tierra, de la Tierra Sagrada, el Umbral de vuestros Sagrados Corazones.

Tomemos un minuto de vuestro tiempo, en el Silencio, en Comunión con el Todo.

(Silencio, Vibración, Comunión)

Del Corazón del Uno al Corazón de Todos, Reciban la Gracia.

Reciban a la Madre Divina y Amada.

Reciban a IS-IS

(Silencio)

Mis Hijitos Amados.

Mis Hijos Queridos.

¡Qué Alegría!

¡Oh! Cuanta Gracia, al venir a hablaros en este momento tan especial, tan grandioso. En estos Tiempos, ¡Tiempos de Revelación!

Como os dijeron los Elohim hace un momento, ¡Alégrense!

Alegraros en vuestros Corazones y transmitan, transpiren esta Alegría en vuestras Vidas, a cada momento de respiración sobre la Tierra.

Sean la Alegría, sean la Levedad, caminen sobre la Tierra confiados, porque los momentos han llegado, los momentos anunciados han llegado.

Como os he hablado siempre a vuestros corazones a través de los mensajes, vivan lo que la Vida os pide vivir. Vivan lo que vosotros mismos tienen que vivir, pero vivan en la levedad, sin juzgamiento, sin resistencias.

Abriros a la Libertad del Ser sobre la Tierra, Seres Liberados, Seres Libres, Seres Unificados, porque la Luz se hace Presente sobre la Tierra.

No existe otra Verdad, no existe otra Realidad.

Basta solamente con que abráis los ojos del Corazón, los ojos de vuestro Ser Interior.

Los Ojos que se sitúan ahí, en vuestro pecho, en el Centro del Centro.

Si Amados, yo les hablo de la Visión del Corazón, la Visión que se abre a partir del momento en el que vosotros os lanzáis, que vosotros os abandonáis verdaderamente a esta Luz, a este Fuego que llega, a este Fuego Sagrado, Fuego de la Libertad.

El Fuego que viene a quemar todas las Resistencias, todas las dudas, todos los miedos.

Eso, Amados, ¡eso no es lo que vosotros sois!

Esos miedos, esas dudas, esas resistencias no sois vosotros.

Hacen solamente parte del mecanismo engendrado sobre la Tierra, a fin de que la Experiencia fuera realizada. No vamos a entrar al fondo de la cuestión del tiempo y del dolor que cada Corazón vivió sobre la Tierra, porque fue esto, ¡oh! Amados Hijos, lo que los que os condujo al crecimiento en la Luz, a vuestro Esplendor, al Esplendor de vuestra Luz.

Pues toda la Experiencia solamente tuvo como objetivo la revelación de la Luz, la más total, la más radiante, elevándoos cada vez más alto, escalando así los Niveles Dimensionales que os conducirán a disolveros en vuestra Verdad.

¡Oh! Amados Hijos.

Niños Amados.

Guarden bien ahí, en vuestros Corazones, que lo que llega es solamente Alegría y que solamente la “persona”, sí, este “vehículo” que os proporcionó vivir esta Experiencia, solamente para poder tener cualquier percepción de destrucción, de aniquilación. Porque ella, y solo ella, desaparecerá, conjuntamente con todo lo que es Efímero. Y vosotros, ¡oh! Amados, Hijos e Hijas, vosotros pasaréis esto como un Sueño. Como despercatando de un sueño cuando abren los ojos y que ya no son más los ojos de la carne.

Vosotros abriréis los Ojos de vuestra Esencia, los Ojos de vuestra Eternidad. La Eternidad que Son y que nunca han dejado de Ser.

Como dice el Comendador de los Ancianos (O.M. Aïvanhov), al despertar de ese Sueño, vosotros os reiréis de todo, en la Levedad, en la Alegría.

Amados, Amadas, Hijos del Uno.

Niños Amados y Reverenciados

Yo os Amo y con todo Mi Amor, os cubro con Mi Manto.

Recibid en el Silencio de Mi Presencia en vuestra Presencia, comulgando en el Amor, en el Fuego de Amor que es nuestra Verdad.

(Silencio, Vibración, Comunión)

Conjuntamente con los Elohim que me acompañan en este Sagrado Momento, yo deposito Mi Beso de Madre en cada Corazón, diciéndoos que nosotros estamos ahí, en vosotros, como vosotros estáis en nosotros, en el Todo, en el Corazón de Todo.

Los Elohim os saludan.

Yo os digo hasta Siempre.

En el Amor, del Corazón.

María – IS-IS


Transmitido por Célia M.




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