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jueves, 2 de abril de 2015

#NUEVO Maestro Jesús El Cristo: Vengo a tocar sus almas con mi más grande Amor Universal- por Solange Marín



Amados hijos de Luz Divina, hijos del Creador, del Todo lo que Es, esencias mismas de la Fuente infinita de amor y sabiduría, hermanos míos, ¡Yo Soy! Jesús El Cristo, y en este día vengo a tocar sus almas con mi más grande amor universal. 

Hace ya mucho tiempo que caminé entre ustedes para esparcir en la Tierra la semilla de Amor de mi Padre/Madre celestial. Fue una dura encarnación asumida desde el amor para enseñarles lo que es el verdadero amor incondicional, lo que es la entrega por el servicio a mis hermanos. Así amados míos es que quiero que me vean, no les pido que sean iguales a mi, porque cada uno de ustedes es libre de sentir y actuar como les dicte su corazón. 

Sólo deseo que comprendan qué es el verdadero amor, que vean con mi ejemplo que sí es posible la entrega absoluta, sin condiciones y sin cuestionar la voluntad de ustedes mismos. Es imprescindible para las almas entender su misión de vida que se han propuesto antes de encarnar, y todas, créanme todas, pasan por el amor incondicional a través del servicio a sus hermanos. Amor es entregar sin ver a quien, ayudar sin ver a quien, amar, amar, amar, esa es la premisa. 

Y cuando digo sin ver a quien me refiero a no discriminar en su amor, a ciertos seres sí y a otros no, no. Sin ver a quien es sin ver las caras, sino sintiendo la unidad perfecta con el Padre/Madre, entendiendo que todos somos hermanos y partes indivisibles de una misma Fuente Divina a la que deseamos retornar como UNO con UNO. Esa fue mi misión en esa encarnación como Jesús El Cristo, muchos me han seguido, pero pocos entendieron mi verdadera misión. 

Por eso vengo hoy a recordarles lo principal: EL AMOR. No hay nada más importante porque en él está contenido todo lo demás. Búsquenme dentro de sus corazones, alimenten la llama crística en el centro de su Ser y al lograrlo, sentirán mi presencia constantemente y estarán siempre movidos por el más inmenso amor de sus almas. Ámense unos a otros como yo los he amado. Es todo por hoy. Los amo en el nombre del Yo Crístico dentro de cada uno de ustedes y les bendigo en la Luz del Padre/Madre Creador como siempre. Les acompaño en su camino, búsquenme y me encontrarán. Cada acto de amor que realicen será una señal de mi presencia dentro de ustedes. 

Yo Soy Jesús El Cristo ¡Yo Soy!