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Posteado por: Eugeni | noviembre 17, 2015
El lenguaje de la Luz Trans-mutación, por Béatrice María Balme
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Universo. Más ilustraciones en el enlace original, al pie de esta entrada.
LA DIFERENCIA CRUCIAL ENTRE LA LUZ ADAMANTINA Y LA LUZ FOTÓNICA
El
espectro llamado “visible” de la luz nunca puede deciros quiénes sois
en Verdad, porque quienes sois en verdad no es de este mundo. No sois
originarios de la luz fotónica. Estáis en este mundo llamado “visible”
del orden de los hologramas, los fantasmas que experimentan la materia,
es decir la luz fotónica, la luz alterada. El cuerpo y el alma están
sometidos a la luz llamada “cristalizada”.
Para
el supra-físico, la luz fotónica es la luz distorsionada. Algunos
hablan de “rarefacción” de la luz a causa de la compresión de la
materia, de la cristalización en resonancia con las fuerzas de atracción
y de repulsión habiendo sido iniciadas voluntariamente por seres que se
tomaron por la Fuente. En el lenguaje cósmico, los nombramos los
arcontes.
Son
pues entidades situadas en dimensiones de conciencias elevadas que
jugaron a manipular las fuerzas de la naturaleza. Todas las religiones
hablan de ángeles caídos. Éstos no son nada más que vosotros y yo que
estamos “cristalizados”. Aceptamos, por un tiempo, experimentar la luz
alterada. No somos los arcontes por eso pero nosotros lo devenimos si
comenzamos a manipular las fuerzas de la naturaleza. Mirad lo que pasa
con este mundo. Toda la humanidad vive en la luz fotónica. Ella está
completamente inmersa dentro. Un arconte, es un arcángel que se volteó,
ni más ni menos. Él mantiene los mundos en la ilusión de la luz. Los
retornos o invaginaciones, todos vosotros las vivís a diario, sólo
vosotros sois libres de quedaros en el papel de avestruz, de niño malo o
de volveros hacia la Luz y respirar finalmente.
Entonces
¿qué es lo que pasa en este mundo? Hay sencillamente ilusión de la luz,
en su desplazamiento en el seno de una onda y de una partícula. Es el
espectro bonito del arcoiris que da forma a vuestro medio ambiente y a
vuestros humores, yo diría. Según los arcángeles situados en la 18a
dimensión, que también están entre nosotros (puesto que nosotros somos
la totalidad de la Creación) este espectro visible no es en absoluto
interdimensional al contrario de la luz vibral, dicha luz adamantina,
característica de los universos unificados.
Así,
el mundo por el cual caminamos no es unificado. Ha sido organizado
sobre una base fotónica que tiene naturalmente embriagada a la
conciencia colectiva. Pues aquí, el cuerpo y el alma están sometidos a
las fuerzas de atracción de la Tierra. Un planeta ¿es por eso limitado a
sus estructuras visibles? No. La Fuente baña la totalidad de la
Creación, lo que significa que un microcosmos es hecho a la imagen del
macrocosmos.
Es
evidente pues que todos los planetas, las estrellas, las galaxias, todo
lo que constituye los universos materiales es de naturaleza
multidimensional. Los que aspiran a continuar haciéndose el poisson rouge (pez
rojo típico en los acuarios) no vendrán a quejarse en el momento de las
tribulaciones del planeta, porque como todo planeta y todo sistema
solar llegados al final del ciclo solar, todos ellos están destinados a
invaginar. Todos ellos son atravesados, penetrados por la luz vibral que
viene para unificar naturalmente a todas las estructuras vivas que no
lo son.
Para
los que no conocen nada de todo esto, a partir del momento en que
vosotros decís “vibrar” por cualquier cosa, es bueno que cualquier cosa
os atraviese en ese momento. No podéis forzosamente identificarlo con
palabras, sin embargo, se siente como “retornado”. Esta es la acción de
la luz vibral que penetra naturalmente en vuestras células porque ella
viene para alumbrarlas, para iluminarlas con su radiación.
Así
las partículas de luz (Adamantina) en el seno de los mundos Unificados
tiene características de localización, de desplazamiento y de forma que
no tienen nada que ver con lo que llamamos Fotones. La Luz es Vibración,
Unidad, Etreté y la Verdad.
Todo
embajador de los Mundos libres que viene para entregar su mensaje está
aquí sólo para revelar esta luz auténtica y son cada vez más numerosos
porque esto es lo vivido.
Aquél
que vino a este mundo sin religión, sin creencia, sin conocimiento es
Cristo. ¿Quién es él? La luz vibral. Jesús Cristo fue el más grande de
los enseñantes sobre la Tierra pero también el más burlado a día de hoy
por las religiones. Él vino naturalmente para alumbrar este mundo.
¿Qué
viene para hacer la Luz auténtica (Vibral)? Las partículas adamantinas
(o partículas diamante) van a agregarse en el seno de nuestras
estructuras densas falsificadas, es decir “separadas” de la luz
auténtica. Ellas van a venir para unificar las estructuras en todo. ¿Por
qué? Porque nosotros somos por naturaleza el Todo. Esta luz pasa así
por el canal mediano de la columna vertebral o Sushumna, transformando
entonces este canal en un canal de cristal y de luz, llamado el canal
del Éter, siendo atado a Er (sonido primordial), permitiendo vibrar a
otra frecuencia en el mismo seno de nuestras estructuras, aquí mismo
sobre este mundo.
Las
partículas adamantinas están dispuestas por 24, creando una Unidad de
conciencia unificada, ellas van a agruparse en múltiples de 24, hasta
dar con lo que es llamado los Agni Deva (Devas de Fuego) que son la
constitución de un conjunto de partículas adamantinas. Entre ellas,
reencontramos a los ultimatones. 1 electrón = 100 ultimatones. Estas
partículas llamadas de infinidad dan la masa a otras partículas.
Estas
partículas tienen características de transformación en el seno de la
ilusión, es decir aquí en este mundo fotónico. Son llamadas la
Inteligencia de la Luz. “Binah” en lenguaje sumerio-akkadiano. Llamamos a
esto la Gracia o la acción de la gracia. Ella es transformadora.
¿Cómo sucede esto en nuestro cuerpo?
Las
partículas adamantinas penetran el núcleo de la célula para eterizar y
reconstruir una célula de luz auténtica. Esto provoca en vosotros una
fatiga, a veces un ras-le-bol(enojo,
estar harto). Si queréis que este trabajo se haga, hace falta que
estéis conscientes de aceptarlo, que lo acojáis, porque sin vuestra
acogida, las partículas adamantinas no podrán hacer su trabajo.
En
la mayoría de los casos, conduzco a los individuos a practicar en Yoga
la respiración solar (llamada consciente) con el fin de que vivan por
ellos mismos el impacto vibratorio de la Luz. Es una inmersión que
conduce naturalmente a la invaginación. El abandono a la luz vibral no
tiene estrictamente nada que ver con las técnicas energéticas empleadas
por quienes nos encontramos en las medicinas alternativas. La medicina
del sonido no es ni una medicina alternativa, ni una medicina
energética. Ella no tiene nada que reemplazar. Ella devuelve al
individuo a su verdad profunda, a su partición de música interior y
original, allí donde nunca hubo alteraciones. Empleo voluntariamente la
palabra “medicina” porque cuando se vive encerrado en una banda fotónica
(un mundo donde la luz es ilusión) se está enfermo. Por consiguiente,
el verdadero médico puede ser sólo un embajador de los Mundos libres y
unificados. Él no viene a este mundo para aprender, ni para saber, él
viene con el Conocimiento. Es por eso que se os repite que ningún
conocimiento exterior (que pertenece a la luz fotónica) puede devolveros
a vuestra verdad, a vuestra eternidad.
La
luz vibral, es también el Verbo creativo. El Verbo es un sonido, es
vibración. Es el sonido primordial que dispone los mundos libres. Él
está en cada uno de nosotros. Es esto lo que el Kriya yoga hace surgir.
Él devuelve la Vida. Él devuelve la Alegría de cada segundo porque la
Luz es Alegría y Completitud. No es una enseñanza.
Así,
el individuo que penetra de lleno su Etreté, puede fácilmente ver los
juegos de las energías de esta luz fotónica que tienen vibraciones
fluctuantes (que afectan al cuerpo emocional y mental relativo al cuerpo
causal) y pueden hacerse impuras. Impuras a partir del momento en que
se crean historias. Somos nosotros quienes decidimos volver de lleno a
la historia, a la experiencia de separación. La Luz vibral no tiene
ninguna historia. Ella no tiene ningún papel. Ella es de toda eternidad.
Es el Gran Espíritu en lenguaje cósmico. Es lo Desconocido para los
místicos. Es la Omnisciencia, la Omnipotencia y la Omnipresencia,
simplemente.
Entre
lo viviente visible que no es alterado por los juegos de la conciencia,
reencontramos los cristales. Ellos contienen la Información pura en la
medida en que vivieron todos los ciclos del planeta (incluso las
vueltas). Los cristales pasaron pues la prueba del Fuego. El cristal se
hace alterado cuando es manipulado mentalmente, así como vosotros. Se
cortan flujos de la luz vibral tan pronto como sois atraídos por las
creencias de la banda fotónica (del mundo tal como lo conocéis) y todos
los arquetipos construidos a partir de esta banda. La luz fotónica es el
equivalente a una película. Es una proyección de la Luz auténtica.
Quien dice “proyección” dice “exteriorización” de la luz. Donde todos
caen en papeles, en juegos de la conciencia y a día de hoy, todos
nosotros estamos invitados a salir de eso porque la Luz vibral viene
para hacer la “limpieza de la casa” en el interior. Ella reanima todas
las estructuras con el fin de que el paso del cuerpo físico al cuerpo de
Etreté se haga lo más simple posible.
El
primero en haber dado el ejemplo sobre la Tierra de esta gran alquimia,
es Jesús Cristo. Llamamos a esto la “Resurección”. Jesús o Jeshua ben
Joseph vino sobre la Tierra para romper todo lazo con la luz fotónica,
la falsa luz a fin de cuentas, con el propósito de reconquistar su
morada eterna. Cristo jamás fue una historia, nunca “existió”; él es de
toda eternidad. Es pues fácil comprender que ninguna religión no pudo
traducir o retraducir el paso de Cristo sobre la Tierra puesto que
escribirlo es ya falsificarlo. Los famosos textos “sagrados” no tienen
nada de sagrado. Ellos forman parte de la luz fotónica. Así como lo que
os escribo en este instante, es inscrito en la banda fotónica. Por más
que os hable de una gran vivencia, de una evidencia, ya lo falsifiqué.
Así
ninguna meditación, ninguna técnica energética, ninguna enseñanza no
puede llevaros a esto, que no sea el respirar la vida conscientemente.
¡Vivir, simplemente! Sea lo que sea que fuimos en encarnación, sean
cuales sean los abrigos que hemos llevado y asumido, el Espíritu que
somos no es nada de todo esto. Él es virgen.
La Luz llamada “limitada” en su desplazamiento en el seno de una onda y de una partícula.
¿Qué
es el Retorno? Es el paso de la conciencia limitada (en la banda
fotónica) a la conciencia ilimitada (a la luz vibral, la luz auténtica).
Es lo que pasa en la superficie de este globo. El planeta invagina y
arrastra con ella, por consiguiente, a todo lo viviente que lleva.
Hablamos aquí “de ascensión” en lenguaje cósmico, el movimiento
ascendente descubierto por los metafísicos.
Entonces,
cuando volvéis a los “rediles”, no estáis más limitados a este cuerpo
físico, ni a esta forma, ni a su identidad, ni tenéis todo aquello que
habéis construido en vuestra vida, por muy florecida que ella sea.
Vosotros salís de la ilusión mientras que todavía camináis en este
mundo. Salís del mundo de Maya, este velo famoso que os impedía ver
claro y vivir otra cosa que el mundo de la materia. En resumen, salís de
la banda fotónica. Vuestro retorno al Etreté la disuelve. No hay pues
más sitio para las historias. Hay que vivir simplemente “reencuentros”
con vosotros mismos.
He aquí lo que yo tenía que confirmaros, por mi propia vivencia y con la participación de los interventores de autresdimensions.com, realidad transdimensional.
Os saludo de toda eternidad y continúo caminando muy cerca de vosotros.
Caminemos juntos en el Uno.
Por Madre Béatrice María Balme
Más ilustraciones y texto original en Centre de sonologie.
Re-Publicado por ANSHELINA, la Luz que llama a despertar
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