Toda
materia, aun la más sutil, está formada por átomos y células integradas a la
luz que les da vida. Como esa luz es energía en acción, tener cuerpo o ser pura
energía no resulta algo antagónico; pero si ustedes creen que los Ángeles
tienen una figura definida, la respuesta es afirmativa.
Los Ángeles
son bellos seres de muy alto nivel espiritual, con una apariencia similar a los
jóvenes que cumplen quince años en la Tierra. Sus cabellos lucen muy claros,
los ojos se ven casi transparentes. Poseen una estatura bastante alta, rostro
de tez clara, grandes ojos, manos largas hermosísimas; siempre están
sonrientes. No es verdad que tengan alas. Eso viene siendo una apariencia
visual, debido a que dos rayos de luz potentísimos salen de su corazón y dejan,
detrás de su figura, una especie de ráfaga luminosa. Se mueven por el poder del
pensamiento como todos los Seres de Luz y los Maestros Ascendidos.
Pertenecen
a la evolución angélica en la cual se integran Ángeles y Arcángeles. La materia
de la que está formado su cuerpo es muy sutil, porque ellos son puro
sentimiento. Prestan su servicio en los Siete Rayos para ayudar y proteger a
los seres humanos. Son bellos, delgados, transparentes muy luminosos. Lejos
están de esas representaciones que los muestran rollizos, con cabellos
ensortijados, desnudos y con alas.
Cuando
los Ángeles son invocados con amor, prestan infinidad de servicios, nobles y
desinteresados: Llevan y traen mensajes, resuelven situaciones conflictivas,
reparan objetos mecánicos, vigilan, protegen a las personas y propiedades, etc.
Pueden materializarse y hablar con los humanos con objeto de ayudar y realizar
algún especial servicio. A veces, lo han hecho según consta en testimonios
bíblicos. Em esos casos excepcionales, no se identifican como Ángeles; por lo
tanto, quienes los contactan, piensan que son personas extrañas a las que no
ven más después. Los que protegen a los seres humanos, son verdaderos Ángeles
Guardianes. Se diferencian de la Divina Presencia porque ésta siempre asiste a
su hijo desde que fue Chispa Divina; aunque se encuentre en los niveles de
conciencia más primitivos. En cambio, el Ángel Guardián elige a alguien para
tenerlo bajo su cuidado, por decisión propia y lo acompaña durante una sola
vida. Los Querubines no son así como los
describen. Se encargan de unir a las personas que se han odiado en su vida
anterior, para que se den amor.