Los residentes de la costa central de Perú, donde se encuentra Lima, la capital del país, deben estar preparados ante la posibilidad de que se registre un sismo de una magnitud cercana a 8,8, según lo advirtió este miércoles Hernando Tavera, director de sismología del Instituto Geofísico del Perú (IGP) dependiente del Ministerio del Ambiente, informa la agencia Andina.
La
zona bajo riesgo, que se extiende 450 kilómetros entre las ciudades de
Chimbote y Pisco, experimenta desde 1746 un "silencio sísmico" sin
fuertes terremotos, lo que significa que allí se está acumulando la energía, que puede liberarse en cualquier momento.
"Según los estudios realizados, se cree que en algún momento se producirá un sismo similar al ocurrido en el 2010 en Chile", dijo Tavera a la agencia.
No obstante, según él, el carácter devastador de los sismos se
debe no tanto al evento geológico en sí, sino al carácter de las
construcciónes y al hecho de que se levanten en lzonas peligrosas. Por
esa razón urgió a los peruanos a, en vez de "preocuparse", prepararse
para el posible sismo, reforzando y revisando la infraestructura de sus viviendas y aprendiendo a cómo actuar en caso de terremoto.
Asimismo,
aconsejó evitar comprar o construir viviendas en las zonas de suelos
blandos, ya que allí los sismos se sienten más fuerte.
Ecuador, sacudido por serie de fuertes terremotos
Mientras
Perú se prepara para un posible fin del "silencio sísmico", el vecino
Ecuador ya ha sido fuertemente golpeado por una serie de mortíferos
terremotos. El pasado 16 de abril un terremoto de magnitud 7,8 en
la escala de Richter azotó el norte de la región costera de Ecuador,
cobrándose la vida de 553 personas y causando múltiples daños materiales
que aún se están evaluando. El epicentro del sismo, que tuvo fuertes réplicas, se ubicó a unos 165 kilómetros de la capital ecuatoriana, Quito.
Ayer
se registró otro movimiento telúrico de magnitud 6,1 con el epicentro
ubicado a una profundidad de 15,7 kilómetros, y a 25 kilómetros de la
localidad de Muisne. El temblor también se sintió en ciudades
ecuatorianas como Esmeraldas, Guayaquil, Quito, Santo Domingo, Cantón
San Miguel de Urcuquí, y en la colombiana de Tumaco.