Congelado En El Tiempo
Canalización de Kryon a través de Lee Carroll, en Grand Rapids, EE.UU.
Sábado 31 de Mayo, 2014
Desgrabación del audio en vivo y traducción: María Cristina Cáffaro
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.
El
verdadero mensaje que tenía para todos ustedes lo dí esta mañana.
Tiene que ver con lo desconocido, ¿verdad? Un sistema oculto dentro de
ustedes. Una consciencia del cuerpo, lista para ayudarlos, si desearan
iniciar un proceso que no llamaré iluminación, sino volverse más grandes
en aquello que conocen. Más grandes en aquello que conocen. Algo que
los empuja hacia adelante, les muestra cosas que los llevan al lugar
correcto, si ustedes escuchan. Ahora bien, esto les está oculto, como
muchas cosas están ocultas para ustedes. Esta canalización en
particular, esta noche, no será una prueba de resistencia (Kryon ríe).
De hecho es divertido para mí, si quieren usar esa palabra. Mi socio no
sabe adónde vamos, y si supiera, probablemente no querría ir allí. (el
público se ríe). Porque ocasiona controversias entre los que escuchan y
leen, pero tengo que decir lo debo decir.
He
aquí la premisa de la enseñanza para esta noche: cada vez que juzgan
una cosa en este planeta, lo hacen con el recurso de lo que ustedes
saben. Y eso, entonces, sesga el resultado de su juicio. Cada decisión
que toman respecto a lo que descubren en la historia, cada decisión,
pasa por un proceso lógico, intelectual, que se honra – tal vez incluso
un proceso científico – basado solamente en lo que ustedes ya saben.
Eso los lleva a conclusiones que suelen estar tan equivocadas como sea
posible. No hay misterio en esto, hay total acuerdo en que es lo mejor
que pueden hacer. ¿Cómo podrían llegar a otras decisiones basados en
cosas que no conocen o de las que no tomaron conciencia? Entonces,
querido ser humano, quiero decirte que en esta era moderna, en esta
cultura, no sabes mucho. No sabes mucho de lo que está allí afuera, de
lo que ha pasado históricamente; no sabes mucho sobre culturas del
pasado que nunca te dejaron algo para que estudies. No sabes sobre las
cosas que simplemente asumes, o costumbres, porque sólo estás usando tu
lógica y el razonamiento de hoy en día para juzgar el pasado.
Por
eso quiero darte algunos ejemplos, y esto me resulta divertido, si se
puede usar esa palabra, delicioso para mí porque puedo exponer algunas
cosas para que pienses, a raíz de lo que no sabías.
Déjame
empezar con un ejemplo que comprenderás muy bien. Voy a titular esta
lección (se ríe) “Energías Antiguas Congeladas en el Pasado.” Energías
antiguas congeladas en el pasado. Queridos, las culturas vienen y se
van. Aprenden algunas cosas que otras culturas usurpan y las pueden
hacer mejor. Y una cultura abandona la cosa que la otra cultura ya no
necesita. En este proceso pasan cientos de años, sin Internet (se ríe),
y no hay nada que buscar, nada para ver, y todo eso se olvida.
Imagina
por un momento que eres un cavernícola. Imagina, por un momento, que
como hombre de las cavernas encuentras una cápsula del futuro, y en esa
cápsula – mi socio me está diciendo esto ahora, porque sabe adónde va
esto – en esa cápsula hay un pasacassette Sony. Ahora bien, esto es
para escuchar cassettes de audio. ¿Y qué piensa el cavernícola? ¡No
tiene idea! Ninguna idea en absoluto; no tiene un concepto de lo que eso
pueda ser. Nada. Ahora bien. Damos vuelta la página. Tienes en casa
un niño de siete u ocho años y le das un paquete con un pasacassette
Sony. No tendrá idea de lo que es. Si le dices que es para escuchar
música, igual no va a tener idea. Puede presionar los botones, abrir la
caja, mirarlo y fruncirá el ceño. No tiene ni un concepto. Entonces,
si te tomaras el trabajo de explicarle qué es, para qué sirve, y le
mostraras un cassete que puede contener todo un álbum de música, pondría
los ojos en blanco. Porque él tiene un aparato mucho más pequeño que
puede contener cien albums de música. Esto no está en su consciencia,
nunca lo ha visto. Un pasacassette: congelado en el tiempo. Los
antiguos no saben qué es; los niños de ahora no saben qué es.
¿Y
qué va a pasar con eso? Si no hubiera Internet, se perdería. Todo el
proceso que ocurría en ese tiempo en que se escuchaba música con eso: la
tecnología, el razonamiento, la ciencia, todo perdido. Hoy ustedes
archivan todo, de modo que hoy en día no se perdería. Pero no es de eso
que quiero hablar, sino del ejemplo. Una tecnología congelada en el
tiempo; ya no se usa; olvidada. ¿Será posible que haya otras? Ahora no
quiero hablar de tecnología, me gustaría hablar de procesos, culturas,
creencias que ustedes no conocen.
Ahora
bien: tu ADN no funciona muy bien; menos del 40%, de modo que cuando
ves ciertas cosas no puedes recurrir al akash; no puedes entrar y
obtener la verdad; sólo puedes tomar decisiones basadas en lo que
sabes. Hay un lugar, en este planeta, donde los indígenas crearon rutas
que no van a ningún lado. Se descubrieron desde el aire: son tan
largas, tan rectas, tan exactas, y no van a ningún lado. Miras la
habilidad con que se hicieron y puedes ver algunas incluso bellamente
pavimentadas, tan rectas como es posible, y recorren a veces cientos de
kilómetros – y no van a ninguna parte. ¿Qué te parece eso?
Entonces
el ser humano recurre a la mayor lógica que le es posible; pueden
formar comisiones para considerar todas las posibilidades de para qué
servían esos caminos. Y dirán: “Bueno, ellos no tenían vehículos, de
modo que no había razón para que construyeran caminos, en realidad;
especialmente tan rectos, y que ni siquiera iban a otra ciudad;
simplemente iban. Interesante; cuando los miras desde el aire es raro,
porque parecen pistas. Pistas de aterrizaje. Entonces, el siguiente
pensamiento lógico – ya que ahora los humanos tienen pistas de
aterrizaje – es que estas son pistas del pasado. Y el siguiente
pensamiento lógico es que, si existen, es porque alguien necesitaba
pistas de aterrizaje. ¿Qué? ¿Vehículos voladores? ¡Extraterrestres!
¿Ven la lógica de esto? ¿Comprenden lo que digo? Ustedes, como seres
humanos, ven a aquella cultura desde su punto de vista, no desde el de
ellos. Entonces existe todo un grupo de la humanidad que mira esos
largos caminos – nosotros no queremos identificarlos – creados por los
antiguos, y dicen “¡Pistas de aterrizaje!” Para los de las estrellas.
Ahora les voy a decir qué son (se ríe) y les mostraré la tontería de lo
que ustedes pensaron que eran; y eso me resulta divertido.
No es divertido para mi socio, pero sí para mí.
En
primer lugar: ¿tiene sentido para ustedes que una nave de las
estrellas, que tiene que conocer el viaje interdimensional, que vendría
del espacio interestelar, necesite una pista de aterrizaje? Nunca
pensaron en eso, ¿verdad? Quiero llevarlos de vuelta a esa cultura,
porque ustedes no saben lo que ellos enfrentaban. Ustedes no saben qué
estaban haciendo. Este es un lugar de la tierra que es desértico; allí
no crece nada. Pero no era así cuando ellos lo habitaban: era
floreciente. Cuando las lluvias cesaron, en esta cultura, su dios les
ordenó construir un camino. Y ellos lo hicieron. No cuestionaron eso.
Cuanto más largo el camino, mayor el honor para su dios, que les daría
la lluvia; y ésta nunca llegó. Construyeron, y construyeron, y
construyeron; la hicieron tan perfecta como pudieron, y cuanto más larga
mejor era la posibilidad de tener lluvias. Pero las lluvias nunca
llegaron. Poco a poco se extinguieron; cuando se fue el último de ellos
, sólo quedó el camino. Esa es la verdad. ¿Sabían eso? ¿Sabían
ustedes algo sobre su dios, su cultura, su clima, conocían algo de todo
esto? La respuesta es ¡No! Congelados en el tiempo; perdidos en la
historia; nunca se escribió, no existía Internet. Esto les conduce a
pensar en las cosas de su propia cultura que ustedes entienden, porque
como tienen aviones, esas tenían que ser pistas de aterrizaje.
Esto
es una entre tantas cosas, querido. Hay una razón para que te cuente
esto, y la vas a ver en seguida. Con la geología pasa algo muy similar,
ya lo hemos tratado antes: ustedes basan todas sus suposiciones
geológicas sobre lo que ven en los cañones y sobre su formación sobre
una premisa: que lo hizo el tiempo. Pero ustedes no estaban allí para
verlo. Se basan en lo que ustedes ven hoy en día. Este mismo planeta
benévolo que no tiene grandes cataclismos, un planeta que está allí
quieto, un planeta benévolo que está gastado por el tiempo, tal vez
millones de años para crear una rugosidad aquí y otras cosas allá.
Déjenme llevarlos a un período de trescientos años que creó el Gran
Cañón, hace largo tiempo, cuando todo un océano corría en ambas
direcciones, a causa de los cataclismos de la Tierra. En trescientos
años cavó ese cañón, así de rápido. Los geólogos les dirán que hay un
delta en cada extremo del cañón ¿les parece que eso tiene sentido?
Corría en ambas direcciones. Pregúntenles si encontraron caracolas
marinas por allí, y les dirán que sí. Hubo un océano, que corría en
ambas direcciones, y cavó ese cañón en trescientos años. Yo estaba
allí.
Ustedes
sólo pueden decidir en base a lo que saben, no a lo que no saben; los
geólogos no saben eso. Y no está en ellos suponerlo porque no hay
evidencia. Porque los tiempos en que sucedió no son evidentes –
todavía. Hay algunas cosas que van a descubrir, que los conducirán a
esto; ustedes observen. Algún día admitirán que toda esta cosa tuvo
corta duración y se produjo muy rápidamente. ¿Ven lo que estoy
diciendo? ¡Ese conocimiento está congelado en el tiempo! Ustedes no lo
tienen. No tienen imágenes de eso; no las tienen hoy en día porque la
Tierra está quieta, en lugar de dinámica, entonces suponen que todo eso
lo produjo en millones de años un pequeño río que talló todo eso. Pues
no fue así.
Los
antiguos crearon estructuras enormes, gigantescas. Tenían bloques de
granito que pesaban toneladas, traídas de canteras a gran distancia, y
construían monumentos que hoy parecerían imposibles. Ustedes los miran y
dicen “¡Era imposible! ¡No pueden haberlo hecho! No tenían la
tecnología de hoy en día, no hay forma de poder construirlos sin ciertos
tipos de máquinas.” Y esa es su decisión. Entonces, ¿cómo lo
hicieron? Otra vez: tuvieron que tener ayuda. Probablemente tenían
aparatos de levitación venidos del espacio exterior.
Ahora
bien, voy a romper el paradigma y contar una verdad que puede que no la
crean: No, no tenían eso (se ríe). El paradigma de tu cultura es que
todo debe hacerse con rapidez y eficiencia. Te cuento sobre la cultura
de ellos. ¿Comprendes que construían monumentos para reyes que aún no
habían nacido? ¿Y sabes cuánto tiempo les llevaba? ¡Vidas! ¿Sabes
cuántas personas participaban? Cientos de miles! Llevar este bloque de
granito hacia allá. Está bien, toma un par de años, se hace pulgada a
pulgada. Se arrastra con palos y sogas. No importa cuánto tiempo se
requiera. A veces eran esclavos, muchas veces no. Estaban allí
voluntariamente para ayudar a su rey, el que aún estaba en el útero de
la reina. El que tendría una pirámide, tal vez, o acaso otro tipo de
estructura, cuando muriera. Y ellos aportaban dos, tres semanas por
año, desde todo el país. Venían de a miles, a tirar de las cuerdas, a
engrasar los palos, y tenían algo que no has tenido en cuenta:
matemáticas, mucho de matemáticas. Entendían de poleas; todas las cosas
que hoy tú conoces, sobre reducción de la fuerza. Sabían de eso.
Planes ingeniosos para deslizar cosas cuesta arriba, lenta, muy
lentamente, con la fuerza de miles de hombres, para colocarlas en un
lugar donde pudieran darse vuelta. ¿Crees que una pirámide siempre tuvo
aspecto de pirámide? ¿Qué aspecto tiene un edificio cuando lo están
construyendo? ¿Se parece al edificio terminado? ¿No te parece que
ellos tendrían cosas allí alrededor para ayudar? ¡Claro que sí!
Pero
eso no fue en tu cultura, y es una ciencia que se congeló en el tiempo.
¡Congelada en el tiempo! Oh, hay pistas de lo que hicieron. No
muchas. Esa es la verdad. Pero tú no podías saberlo. Porque todo lo
que ustedes hacen es mirarlo desde el punto de vista de lo que saben. La
idea de que algo lleve años, tal vez toda una vida, con miles y miles
de hombres involucrados, no está en tu consciencia. Hoy en día no se
construyen cosas de ese modo. Por tanto, no extrapolen su fórmula a la
que ellos usaban.
Les
hemos contado que los lemurianos tenían templos de rejuvenecimiento en
la cima de Hawaii. Era una montaña, elevada por un bulto que estaba
allí. Allá arriba había glaciares. Ese bulto había estado allí durante
miles de años, ya estaba incluso antes de que llegaran los lemurianos.
La montaña de Hawaii es la más grande del planeta, medida de la cima al
pie, aún cuando el pie de la montaña está bajo agua. La mayoría de ella
quedó expuesta, empujada hacia arriba por este bulto de magma. El magma
se hinchó en forma muy similar a como pasó en el parque Yellowstone,
que es otro punto caliente del planeta. Es un proceso geológico que
tiene lugar; no es un misterio. Elevó las cumbres de la montaña por
encima de los 30.000 pies. Allí hace mucho frío, y estuvo muy frío
durante un largo, muy largo tiempo. Cuando hay temperaturas de 50
grados centígrados bajo cero, y persisten por muchos, muchos años, allí
hay frío extremo. Ahora bien, los lemurianos usaron tecnología de
superfrío, sin electricidad, sin el conocimiento de nada más que la
química. Con ciertas clases de química se puede extrapolar calor de
cualquier cosa. Química congelada en el tiempo, y no es un juego con la
palabra congelar (se ríe). Usaron una tecnología de superfrío para
crear un evento cuántico en la cima de la montaña, y eso creó los
templos de rejuvenecimiento en los que ellos la usaban para cambiar el
ADN. De hecho ellos podían manipular la masa; ustedes están recién ahora
descubriendo la tecnología del superfrío. Pero algunos dirían:
“Imposible, no pueden haber hecho esas cosas sin computadoras, sin
electricidad, sin otras cosas” todo esto basado en lo que hoy ustedes
conocen como su realidad, pero no en lo que ustedes no saben.
Te
daré un ejemplo más para el final, de esto queremos hablar. Querido
ser humano, tú crees saber mucho sobre la salud, ¿verdad? Tienes la
ciencia más moderna. Pero hay cosas que no conoces. ¿Puedes imaginar
ser parte de un sistema de salud que no conocía los gérmenes? (se ríe) Y
luego, cuando tuvo lugar ese descubrimiento, todo cambió. ¿Te imaginas
cómo habrá sido? ¡En los campos de batalla, aún con los mejores
médicos, sin saber nada de gérmenes! Sin importar qué hicieran, las
tropas morían igual. Porque ellos no entendían nada de esterilización,
ni de microbios, ¡ni nada de eso! Nada. Hasta que recibieron esa
información, y de pronto todo cambió.
Ahora
bien: aquí va la premisa del día: ¿será posible, querido ser humano,
que se te haya perdido algo en el camino? ¿Tienes alguna idea de lo que
hay en las selvas de esta Tierra? Los chamanes lo sabían: podían curar
casi cualquier cosa. Gaia colabora con ciertas clases de energía, y
las energías chamánicas del planeta estaban muy dedicadas a conocer lo
que yo llamaría la química de las plantas. Dentro de la colaboración
del sistema de Gaia hay curas para todas las enfermedades. ¿Sabías eso?
Ellos podían curar tantas cosas, directamente de la Tierra , en forma
natural, sin efectos secundarios, sin artificialidad, sin
industrialización. Ya has oído sobre esto. Los consideraban raros, así
que vivían en las afueras de la aldea, y todo lo que ellos sabían, todo
lo que sabían, se perdió. Se perdió con las ideas modernas sobre Dios;
se perdió cuando ellos curaban a alguien y no se comprendía y lo
consideraban perverso. ¡Completamente perdido! Ahora bien; aquí estás;
eso está congelado en el tiempo. Todo lo que ahora tienes es
artificial. Casi todo. Aquí está el meollo de la cuestión: mi socio
hizo hoy algo que yo le pedí; tomó tiempo para presentarles cómo podría
ser el hombre nuevo. Cuando empieza a aumentar el porcentaje en que
opera el ADN, empiezan a nacer niños que aprovechan el akash, ya no
tienen que aprender a caminar, a leer. Lo hacen, en un tiempo breve,
antes de los dos años de edad. Porque están recordando algo que ya
sabían.
Ahora
bien: esto es nuevo. Vayamos al paso siguiente, alma vieja. ¿Cuántos
de ustedes han sido chamanes? ¿Empiezan a entender esto? A partir del
grupo de almas viejas, en las próximas dos generaciones, en este planeta
se recordará la tecnología congelada. Recordarán la química que extrae
el calor, recordarán los principios de la supervivencia; esto les
llegará por partes, y habrá algunos de ustedes que se harán famosos por
sus descubrimientos, que sólo consisten en recordar lo que solía ser.
Será el comienzo de una revolución; no en la medicina, sino en la
relación con las selvas; estas cosas se rescatarán al recordar las
energías chamánicas y la información en la que tantos participaban. Y
la mayor diferencia por la cual lo recordarán ahora y no antes, es que
ahora será seguro. Tres años atrás no lo era. Esa es la diferencia
entre el entonces y el ahora.
Hoy
les doy estos ejemplos de algunas tonterías que ustedes ven, en
decisiones predispuestas que se basan sólo en lo que saben, en lugar de
lo que recuerdan del pasado. Eso va a cambiar. Cuanto más alto llegue
el porcentaje del ADN, más recordarán. Ese proceso de recordar sucederá
en un grupo específico; el grupo chamánico; las almas viejas. Los que
se sientan en un salón como éste, todo el día oyendo a alguien hablar,
en un día hermoso. ¿Porqué están aquí? ¿Porqué están aquí? Porque
quieren saber más, ¿No es verdad? ¿Pueden sentirlo? ¿Lo sienten? Está
allí, saben qué es. Quiero que penetren en su esencia y desarrollen la
intuición que tienen. Queridos, almas antiguas, no los que aún no han
nacido, sino las que están aquí, son las que van a descubrir estas
cosas, presentarlas, recordarlas, comenzar a usarlas. No tendrán
oposición. ¿Me oyen? No habrá oposición, porque ustedes serán
demasiados. Va a ser muy bien recibido, va a ayudar a sanar el
planeta. Eso es un buen mensaje.
Hay
un lugar para la química, para una química elegante; hay un lugar para
la elegancia de las soluciones naturales. Todo puede usarse unido en
equilibrio; siempre se lo hemos dicho; uno no usurpa lo otro. ¡Pero es
hora de que recuerden cómo sanarse a sí mismos! Desde Gaia. Con Gaia.
A través de Gaia.
Ahora
ya saben porqué es parte de los nueve atributos del ser humano. Y ese
es el mensaje para hoy. Será recordado por muchos (se ríe), estudiado
por pocos.
Yo
soy Kryon, enamorado de la humanidad. Sé qué está viniendo; ya lo he
visto antes. No permitan... (suspira) No dejen que los atributos de lo
que ven a su alrededor los engañen para creer que las cosas no están
mejorando. Les dije que la vieja energía daría pelea; ¡hay tantos
humanos que quieren volver a como era antes, queridos! No tendrán
éxito.
Y así es.
Kryon
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