Una colaboración de Pauline
En vuestro camino del despertar hacia altas vibraciones de luz debéis tener presente que la luz atrae a la oscuridad. Y, teneis que estar en guardia y ser observadores ante el posible rapto no deseado de vuestra energía de luz.
Tenéis 10 posibles amenazas, ante las cuales tenéis que inmunizaros y que ya sabéis como, pues, en vuestro despertar está programado en una parte de vuestro ADN, que es un ácido nucleico que contiene instrucciones genéticas precisas, desde tiempos ancestrales.
Bien, pasemos a describir que posibles y/o probables amenazas os encontraréis en vuestra vida biológica. Les llamaremos variables de
"vampirismo" energético y son los siguientes:
1. Vampiro Quejumbroso: se queja siempre, de todo y a todos. Cuando nos encontramos con él, ya se está quejando de porqué no le telefoneamos o lo visitamos. Si tú aceptas la queja y te sientes culpable, abrirás las puertas. Lo mejor es usar tu propia arma, quejándote a tu vez y preguntando por qué él no llama o aparece. Déjalo confuso, sin tiempo para responder y retírate rápidamente.
2. Vampiro Crítico: critica de todo y a todos; lo peor es que solamente critica negativamente. Ve la vida solamente por el lado sombrío. La murmuración tiende a crear en la víctima un estado de Alma oscuro y pesado, que abrirá su sistema para que la energía sea succionada. Dile “no” a sus críticas y nunca estés de acuerdo con él. La vida no es tan negra así. Lo mejor es salir y cortar el contacto.
3. Vampiro Adulador: es el famoso “barbero”. Adula el ego de la víctima, cubriéndola de elogios falsos, intentando seducirle. Mucho cuidado para no prestar oídos al adulador, pues él espera que el orgullo de la víctima abra las puertas del Aura para succionar la energía.
4. Vampiro Reclamador: reclama de todo y de todos. Se opone a todo, exige, reinvindica, protesta sin parar. Lo más gracioso es que no siempre dispone de argumentos sólidos y válidos para justificar sus protestas. La mejor táctica es dejarlo hablando solo.
5. Vampiro Inquiridor: Su lengua es una ametralladora. Dispara preguntas sobre todo y no da tiempo para que la víctima responda. Verdaderamente él no quiere respuestas sino desestabilizar el equilibrio mental de la víctima, perturbando su flujo de pensamientos. Para salir de sus garras, no te preocupes por buscar respuestas. Responde haciéndole una pregunta bien personal, contundente y procura apartarte en cuanto te sea posible.
6. Vampiro Lamentoso: son los lamentadores profesionales, que desde hace años lloran sus desgracias. Para succionar la energía de la víctima, ataca por el lado emocional y afectivo. Llora, se lamenta y hace cualquier cosa para despertar pena. La víctima es siempre la desafortunada. Corta sus lamentaciones diciendo que no te agradan las quejas, pues no resuelven ninguna situación.
7. Vampiro Pegajoso: Embiste contra las puertas de la sensualidad y sexualidad de la víctima. Parece un pulpo queriendo envolver a la persona con sus tentáculos. Succiona la energía seduciendo o provocando náuseas y repulsión. En los dos casos estarás desestabilizado y vulnerable. Inventa una disculpa y huye rápidamente.
8. Vampiro Grillo Parlante: la puerta de entrada que él quiere derrumbar es tu oído. Puede hablar durante horas y, mientras mantiene la atención de la víctima ocupada, succiona su energía vital. Para librarte inventa una disculpa, levántate y vete.
9. Vampiro Hipocondríaco: cada día aparece con una enfermedad nueva. De esa forma llama la atención de los demás, despertando preocupación y cuidados. Mientras describe los pormenores de sus males y cuenta sus interminables sufrimientos, roba la energía del oyente, que después se siente pésimo.
10. Vampiro Conflictivo: para él el mundo es un campo de batalla donde las cosas solamente serán resueltas a golpes. Quiere que la víctima compre su pelea provocando en ella un estado de rabia, irritación y agresividad. Ese es uno de los métodos más eficientes para desestabilizar a la víctima y robarle la energía. No cedas campo a la agresividad, procura mantener la calma y corta lazos con éste Vampiro.
El vampirismo energético puede ser de dos maneras, consciente o inconsciente. El vampirismo energético consciente es cuando una persona deliberadamente se apodera de la energía de otra para provecho propio, y el inconsciente es cuando sin querer hacerlo también lo hace.
Estos seres malévolos se entrometen en tu vida ignorando cualquier limite o privacidad.
Hacen un problema grandísimo de algo insignificante, creando tragedias a su alrededor.
Quejándose constantemente de sus parejas, hijos, trabajo, de su mala suerte, enfermedades y les encanta ventilar cada detalle.
Criticando tu vestimenta, tu peinado, tu pareja, tus amigos, y tu perro son gente muy negativa.
No toman un NO como respuesta, no toman en cuenta tus necesidades.
Te envuelven en un halo de negatividad después de haberte tomado por sorpresa con todas sus quejas.
Culpando a los demás por sus problemas, ya que no pueden tomar responsabilidades.
Frena y detén con el inmenso poder que aflora de tí a la negatividad.
No te pongas nervioso/sa si crees que no puedes. No se trata de crees se trata de sentir y tu sabes cómo detenerlo si te haces las preguntas adecuadas para encontrar las respuestas correctas.
Es importante y fundamental mantener tu vibración de luz tan alta que no des entrada a esta gentuza tóxica involucionada para que utilize tu energía. Su energía es de tan poca calidad y adulterada que necesitan de los demás. Sus ataques duran poco tiempo cronológico si te ven con el aura fortalecida.
Un consejo sea la situación que sea muestrales indiferencia y ríe sutilmente para que sepas que los has identificado y te darás cuenta que si comienzas a bostezar ante sus narices los desmoronas y su ataque energético, es un absoluto fracaso y sin mirarte a los ojos se irá, con ira ante su fallo en su sistema operativo agresor. Podríamos decir que se ha AUTOJODIDO. Tu eres más y mejor.
Y recuerda siempre, te halles en la dimensión que te halles que habéis despertado en busca de la luz.
En vuestro camino del despertar hacia altas vibraciones de luz debéis tener presente que la luz atrae a la oscuridad. Y, teneis que estar en guardia y ser observadores ante el posible rapto no deseado de vuestra energía de luz.
Tenéis 10 posibles amenazas, ante las cuales tenéis que inmunizaros y que ya sabéis como, pues, en vuestro despertar está programado en una parte de vuestro ADN, que es un ácido nucleico que contiene instrucciones genéticas precisas, desde tiempos ancestrales.
Bien, pasemos a describir que posibles y/o probables amenazas os encontraréis en vuestra vida biológica. Les llamaremos variables de
"vampirismo" energético y son los siguientes:
1. Vampiro Quejumbroso: se queja siempre, de todo y a todos. Cuando nos encontramos con él, ya se está quejando de porqué no le telefoneamos o lo visitamos. Si tú aceptas la queja y te sientes culpable, abrirás las puertas. Lo mejor es usar tu propia arma, quejándote a tu vez y preguntando por qué él no llama o aparece. Déjalo confuso, sin tiempo para responder y retírate rápidamente.
2. Vampiro Crítico: critica de todo y a todos; lo peor es que solamente critica negativamente. Ve la vida solamente por el lado sombrío. La murmuración tiende a crear en la víctima un estado de Alma oscuro y pesado, que abrirá su sistema para que la energía sea succionada. Dile “no” a sus críticas y nunca estés de acuerdo con él. La vida no es tan negra así. Lo mejor es salir y cortar el contacto.
3. Vampiro Adulador: es el famoso “barbero”. Adula el ego de la víctima, cubriéndola de elogios falsos, intentando seducirle. Mucho cuidado para no prestar oídos al adulador, pues él espera que el orgullo de la víctima abra las puertas del Aura para succionar la energía.
4. Vampiro Reclamador: reclama de todo y de todos. Se opone a todo, exige, reinvindica, protesta sin parar. Lo más gracioso es que no siempre dispone de argumentos sólidos y válidos para justificar sus protestas. La mejor táctica es dejarlo hablando solo.
5. Vampiro Inquiridor: Su lengua es una ametralladora. Dispara preguntas sobre todo y no da tiempo para que la víctima responda. Verdaderamente él no quiere respuestas sino desestabilizar el equilibrio mental de la víctima, perturbando su flujo de pensamientos. Para salir de sus garras, no te preocupes por buscar respuestas. Responde haciéndole una pregunta bien personal, contundente y procura apartarte en cuanto te sea posible.
6. Vampiro Lamentoso: son los lamentadores profesionales, que desde hace años lloran sus desgracias. Para succionar la energía de la víctima, ataca por el lado emocional y afectivo. Llora, se lamenta y hace cualquier cosa para despertar pena. La víctima es siempre la desafortunada. Corta sus lamentaciones diciendo que no te agradan las quejas, pues no resuelven ninguna situación.
7. Vampiro Pegajoso: Embiste contra las puertas de la sensualidad y sexualidad de la víctima. Parece un pulpo queriendo envolver a la persona con sus tentáculos. Succiona la energía seduciendo o provocando náuseas y repulsión. En los dos casos estarás desestabilizado y vulnerable. Inventa una disculpa y huye rápidamente.
8. Vampiro Grillo Parlante: la puerta de entrada que él quiere derrumbar es tu oído. Puede hablar durante horas y, mientras mantiene la atención de la víctima ocupada, succiona su energía vital. Para librarte inventa una disculpa, levántate y vete.
9. Vampiro Hipocondríaco: cada día aparece con una enfermedad nueva. De esa forma llama la atención de los demás, despertando preocupación y cuidados. Mientras describe los pormenores de sus males y cuenta sus interminables sufrimientos, roba la energía del oyente, que después se siente pésimo.
10. Vampiro Conflictivo: para él el mundo es un campo de batalla donde las cosas solamente serán resueltas a golpes. Quiere que la víctima compre su pelea provocando en ella un estado de rabia, irritación y agresividad. Ese es uno de los métodos más eficientes para desestabilizar a la víctima y robarle la energía. No cedas campo a la agresividad, procura mantener la calma y corta lazos con éste Vampiro.
El vampirismo energético puede ser de dos maneras, consciente o inconsciente. El vampirismo energético consciente es cuando una persona deliberadamente se apodera de la energía de otra para provecho propio, y el inconsciente es cuando sin querer hacerlo también lo hace.
Estos seres malévolos se entrometen en tu vida ignorando cualquier limite o privacidad.
Hacen un problema grandísimo de algo insignificante, creando tragedias a su alrededor.
Quejándose constantemente de sus parejas, hijos, trabajo, de su mala suerte, enfermedades y les encanta ventilar cada detalle.
Criticando tu vestimenta, tu peinado, tu pareja, tus amigos, y tu perro son gente muy negativa.
No toman un NO como respuesta, no toman en cuenta tus necesidades.
Te envuelven en un halo de negatividad después de haberte tomado por sorpresa con todas sus quejas.
Culpando a los demás por sus problemas, ya que no pueden tomar responsabilidades.
Frena y detén con el inmenso poder que aflora de tí a la negatividad.
No te pongas nervioso/sa si crees que no puedes. No se trata de crees se trata de sentir y tu sabes cómo detenerlo si te haces las preguntas adecuadas para encontrar las respuestas correctas.
Es importante y fundamental mantener tu vibración de luz tan alta que no des entrada a esta gentuza tóxica involucionada para que utilize tu energía. Su energía es de tan poca calidad y adulterada que necesitan de los demás. Sus ataques duran poco tiempo cronológico si te ven con el aura fortalecida.
Un consejo sea la situación que sea muestrales indiferencia y ríe sutilmente para que sepas que los has identificado y te darás cuenta que si comienzas a bostezar ante sus narices los desmoronas y su ataque energético, es un absoluto fracaso y sin mirarte a los ojos se irá, con ira ante su fallo en su sistema operativo agresor. Podríamos decir que se ha AUTOJODIDO. Tu eres más y mejor.
Y recuerda siempre, te halles en la dimensión que te halles que habéis despertado en busca de la luz.
Maestro viejo | junio