CONVERSANDO CON
EL ARCANGEL MIGUEL
28-10-2013
Canalizado-por María Ruso
Me
encontraba, mirando el sol, en pleno mediodía, sentía, la presencia del arcángel miguel, que me
iluminaba, con un
azul claro, como el cielo, todo lo veía azul. Entonces, preguntas venían a mí y comenzamos a dialogar.
Yo
soy el arcángel Miguel, y mis
huestes, y los ángeles del Señor, están aquí
ahora.
Muchas
preguntas pasan por tu cabeza, que deseas saber, bien amada mía.
Es el tema sobre los tiempos que están transcurriendo, y la luz que se emana del universo, es tan
potente, que os hace tambalear.
Si, mi amada,
hermana, la luz es muy potente, y
vuestras existencias, son débiles y precarias, por eones de tiempo que habéis permanecido
en las tinieblas, en los claros y oscuros intermitentes.
Este
proceso de luz, es igualmente gradual, a
medida que estáis, incorporando las partículas
cristales, os volvéis, más fuertes, e invulnerables, porque la luz, se establece en todas vuestras células, y la transformación de vuestros cuerpos es, inevitable. Permaneced en la luz, y en
el ahora, y las modificaciones, se
producirán en un abrir y cerrar de vuestros ojos.
Ahora me hablas, sobre una meditación, que ya tú hacíais, y has encontrado un video,
sobre centrarse en el centro sagrado de vuestro corazón.
Y tú misma, has perfeccionado, en
formar un círculo de luz,
brillante, formando una fortaleza, dentro de tu corazón. Y me dices, encontré el lugar sagrado del
Buda, donde todo lo es.
En efecto,
es el centro del iluminado, en
vida, donde no existe ni el tiempo ni el
espacio, que el mismo lo llama el vacío,
la nada, pero que encierra, el Todo.
Todos
los secretos de la divinidad, se
encuentran allí, desde el mas mínimo detalle, que os dado vuestro Creador, para que os identifiquéis, con la
magnificencia de lo creado.
Allí, esta el secreto escondido de vuestra
luz, es el motivo por el cual nunca dudéis
que sois inmortales. Aunque todo puede
perecer, el lugar sagrado se manifiesta como un
gran sol, el que tú estáis mirando ahora, dentro de ti.
Dentro de ese sol, que irradias,
eso eres tú, solo presencia.
Este
lugar es mágico, no es de este mundo,
porque de el, nacen las mas maravillosas revelaciones y misterios
que se vuelven realidad.
Estáis
llamados amados míos, hermanos, a recordar, y a accionar en resonancia con vuestro sentir que proviene del corazón. Estos son
los tiempos, la misión por la cual habéis esperado siglos y siglos,
es la hora, es la hora de la unión, vuestra boda,
con lo celestial.
Y todo
ha sido preparado, ante vosotros, para que ya,
vuestro corazón ilumine tu mente
creadora. Han quedado atrás, los dominios del ego.
Pero me dices,
ahora, como se hace?, con los restos de oscuridad que pueden acechar…
Ningún resto de oscuridad, puede ya echar sombra, sobre la luz,
es una ilusión que sigue
existiendo en vuestras mentes, no es tangible.
Vosotros
mis bien amados, permaneced en
vuestro lugar sagrado, es
tan inmensa la luz, que derramáis, y llega a los confines del universo y es
devuelta, en concordancia.
El amor que reside en el lugar sagrado, es el amor de DIOS Padre/Madre creador.
Yo, soy el arcángel Miguel, y mis huestes, mis milicias celestiales, llevamos, el amor, en nuestras vestiduras celestiales, cada vez, que abrimos nuestras alas de amor, nos fortalecemos de una investidura invencible, impenetrable, que forma barreras en círculos concéntricos, que llegan a vosotros en forma de espiral. Nuestras armas, están colmadas con el amor del Padre, nuestras espadas son de cristal, como lo es vuestro corazón, nuestro corazón es similar al de vosotros.
Nuestro
corazón, late a través de la luz, emite vibraciones que son del universo.
Nuestros
sentimientos, son solo de luz, nuestras
emociones también, os habéis creído, que cuando vosotros, estáis tristes, susurramos en vuestros oídos, sentimientos de luz y
emociones de luz, con el propósito de
llevar paz y armonía a vuestras vidas. Y
esas emociones y sentimientos que vosotros manifestáis, como la tristeza, la nostalgia,
la desazón, la ira, que no
son de luz, llegan a nosotros como nubes oscuras, en ese
momento a menos que nos llamen, no nos
podemos acercar, porque nuestra esencia es amor divino. Solo observamos y
respetamos, vuestro libre albedrio.
Una
sola e insignificante, señal, de vosotros,
hacia la luz y la compasión,
en un instante hace posible, que actuemos.
Es así,
como muchos de vosotros, habéis dicho, y habéis visto, tanta crueldad, y tanta maldad, y hasta habéis pensado, como Dios puede permitir esto.
Sois
vosotros, los que lo habéis permitido. La luz del amor de vuestros corazones, no estaba encendida, el fuego sagrado del amor que lo quema todo. Permanecía dormido, creyendo que ya todo eso era normal, para
vuestras vidas.
Permaneced
en el fuego sagrado del amor, amados
hermanos. Abrid vuestras alas, encendidas en luz y amor.
Agitad, vuestro amor, y que llegue a los confines del
universo. No solo acudiremos nosotros al
llamado, llegaran los maestros,
vuestros guías, conocerán la Presencia
de Dios, manifestada en vuestro lugar
sagrado.
Yo
soy el arcángel Miguel, y mis ángeles
celestiales, me despido de vosotros mis bien
amados.
En
medio de tan inmenso mensaje, te doy las gracias mi amado
Miguel, por esta enseñanza de amor que
he recibido.