Como
siempre, después de la Luna Nueva, viene la Luna Llena en el signo
opuesto a donde se encuentra el Sol, por tanto esta lunación ocurre en
el ángulo Capricornio (Sol) y Cáncer (Luna).
Como
todas las Lunas Llenas, esta es diferente a todas las anteriores. Se
forma exacta a unos 26º y forma una T-cuadrante, es decir que hay un
planeta que está en un ángulo de 90º tanto al Sol como a la Luna. En
este caso en particular, Ceres, Diosa de la Agricultura y de la cosecha.
Diosa Madre, llamada Demeter por los griegos y con su hija Persefone,
forman parte del mito de Hades, (Plutón) uno de los más importantes y
relevantes de la Mitología Griega y que tiene un profundo significado en
nuestra psiquis. Ceres representa el arquetipo de Madre, la que cuida,
alimenta y protege. La
relación Madre-Hija, se describe en este mito, sobre todo en ese punto
tan importante que es la adolescencia, cuando la Hija, se enamora y
comienza el proceso de separación de Madre. Aunque en el mito,
Persefone, es violada y secuestrada por Plutón, es en el proceso de
vivir en Submundo, como Reina del mundo de lo muertos, que descubre su
sexualidad, su necesidad de separarse de Madre y su poderío de mujer, ya
que por primera vez se siente deseada y por un dios.
Con
la intervención de Zeus, Plutón (Hades) y Ceres, llegan a un acuerdo,
por el cual, Persefone, pasa 6 meses del año con su madre “sobre” la
tierra, que coinciden con la Primavera y el Verano y los otros 6, en el
Submundo como esposa y Reina del Gran Abajo que es para el comienzo del
Otoño y el Invierno. Aunque a la joven Persefone, nadie le pregunta
nada, para tal arreglo, ella descubre, que al estar con su madre, es
Hija, por lo tanto no tiene poder alguno, y en cambio cuando está con
Hades, gana todo su poderío de mujer, ya que es deseada y además Reina.
Aunque la historia de Ceres tiene que ver con el signo de Cáncer, la de
Persefone, con Escorpio.
Junto
a Ceres que está a unos 26º de Libra, se encuentran Vesta, diosa del
Hogar y guardiana del Fuego Divino (23º), y también Marte, Dios de la
Guerra (18º), por tanto estos tres son los planetas focales de esta
T-cuadrante, aunque desde la distancia, la Gran Cruz se completa con
Eris, a unos 21º de Aries. Marte a su vez forma una cuadratura exacta a
Venus que se encuentra en moción retrógrada en Capricornio, que el 2 de
Febrero formará una conjunción casi exacta a Plutón.
El
elemento femenino es potente en esta lunación, con el foco en temas que
tienen que ver con lo femenino y por tanto con la Naturaleza y la
Tierra. Es como si quisiera recordarnos la importancia de encontrar un
balance (Ceres, Vesta y Marte en Libra) entre lo femenino y lo masculino
y el retorno a la Diosa, lo que equivale a decir, volver a respetar los
ciclos naturales. En todo. En lo que plantamos, lo que producimos, lo
que obtenemos de la tierra, los alimentos que ingerimos cada día, lo que
le damos de comer a nuestros hijos, y por sobre todo, cómo cuidamos de
nosotros mismos, de nuestro cuerpo y de nuestra Tierra. Un bonito
recordatorio que depende de todos nosotros, el destino de nuestro
planeta y de nuestras vidas. La tierra y el espacio que nos fué dejado
por nuestros ancestros, también entra en este simbolismo de Ceres, por
tanto, conflictos por las fronteras y nacionalismos son de esperar.
Cáncer
y Capricornio, representan los arquetipos de Madre y Padre,
respectivamente, es a través de nuestra relación con estas dos personas
que nos dieron la vida que aprendemos sobre el mundo de las emociones, a
amar, a odiar, a cuidar, a proteger y a saber como valernos por
nosotros mismos en la vida. Las grietas que hay en nuestra relación con
estas dos figuras, se manifestarán en nuestra relación con los demás y
sobre todo con nuestra pareja. Por tanto, la relación con alguna de
estas dos personas se ve iluminada en esta Luna Llena, que aunque sea
exacta en la madrugada del 16, ya podemos sentir con fuerza, ya que
vuelve a activar la Gran Cruz, formada por Urano-Plutón-Júpiter y Marte
en los signos cardinales, como para la Luna Nueva del 1 de Enero.
Si
nuestros padres están muertos, este proceso ocurre igual, pues ellos
viven en nuestro interior, para siempre. Nuestra relación con padre y
madre, continua, aún cuando ellos ya no están en este mundo. Si nos
hemos convertido en adultos, algo que no ocurre por “default”, sino que
hay que trabajárselo mucho, entonces aunque ya no seamos “hijos”, la
relación continua igualmente. Diferente, pero igualmente real.
Justo
cuando la Luna se forma exacta, Venus en Capricornio y Marte en Libra
forman una exacta cuadratura. Esto reavivará el tema de trabajar juntos
para encontrar armonía en nuestras relaciones personales. Marte se
encuentra en el signo que rige Venus, acentuando la colaboración por
encima de la lucha. El encontrar soluciones diplomáticas, por encima de
más guerras es urgente. Me pregunto si los Shia y los Sunis, los
Israelís y los Palestinos, los Catalanes y los Españoles, alguna vez,
llegarán a aceptarse y colaborar, para fortalecer su región en vez de
debilitarla.
El
auto-análisis de dónde radica nuestro verdadero poderío es un tema de
esta lunación, cómo nos cuidamos y cómo alimentamos a nuestros seres
queridos, física y emocionalmente, también lo es. Cáncer y Ceres, son
dos símbolos de Madre, por tanto, tiene mucho más que ver con la Madre y
el Padre que todos llevamos dentro, que con los padres actuales. Busca
en tu interior y pregúntate a quién cuidas.
Fuente: http://astrologiaarquetipica.wordpress.com/2014/01/12/luna-llena-en-cancer-15-y-16-de-enero/