¿Cuál es el primer paso para acallar la mente? por Eckhart Tolle
¿Cuál es el primer paso para acallar
la mente?
por Eckhart Tolle
Tomar conciencia de que esos
espacios existen en un día normal. Estás mirando a un árbol o al cielo, a las
nubes, y es un momento en el que no hay ningún pensamiento. Solamente la
percepción y la conciencia a través de la cual la percepción sucede. Un
espacio. El primer paso consiste en darse cuenta de que, sin hacer nada,
algunos espacios existen en mi vida. Después se pueden buscar esos espacios
activamente. Yo recomiendo hacer cosas que uno hace normalmente como lavarse
las manos, tomar un café, ir de aquí a allí, entrar en la escalera, subirse al
ascensor… tomando conciencia de acto y del momento, sin hacer de ello un
medio para un fin sino un fin en sí mismo. Lavarse las manos sintiendo el agua,
el jabón, secarse las manos… Solamente la percepción y la conciencia.
Otra cosa que también recomiendo es cuando entras en tu coche, cierras la puerta
y te quedas unos treinta segundos sin hacer nada, sentir el cuerpo, la vida
dentro del cuerpo. No es mucho, 30 segundos, pero muchos de estos momentos en
un día inician un cambio. Esos pequeños momentos en los que no pensamos sino
que estamos conscientes sin pensar. Es más importante tener muchos momentos
pequeños durante el día que estar en una meditación de media hora cada día y
luego pasarse el día sin tener espacios. Entonces empieza un cambio, surge la
conciencia no condicionada, la conciencia pura. Lo demás, los pensamientos, son
una forma de conciencia condicionada por el pasado. Casi toda la gente está
atrapada en un sentido del ‘yo’ que depende de los pensamientos
condicionados y una imagen mental que tiene de “quién soy”, o sea
una identidad que depende de los pensamientos. Eso significa moverse por la
superficie de la vida sin nunca ir más profundamente. Una vida de ese modo se
hace muy insatisfactoria, siempre hay sufrimiento. Si tu vida se desarrolla
solamente en la superficie del ser, que es cuando te identificas siempre con
los pensamientos, entonces le falta la profundidad y sufres.