La Llama Gemela y la Encarnación del Divino
Femenino o
Gran Madre
Gran Madre
La Activación de los Códigos Diamante en la Tierra ha
alcanzado la etapa donde la Unión de la Flama Gemela o Corazón Sagrado ha sido
completamente lograda. Esta es una unión interna donde el Divino Femenino y el
Divino Masculino se reunen en Unión Sagrada para crear la Nueva Realidad.
En este tiempo particular, es la energía de la Gran Madre
la que se está sintiendo más fuertemente. Como Ma’at, la Guardiana del
Balance Cósmico, ella está despertando en muchas personas. Esta es una energía
intensa que se expresa a si misma comúnmente como Vacío, como vacuidad o la
nada, previa a la Manifestación. Para muchos, tener que encarnar el Vacío es
una experiencia aterradora, especialmente en una sociedad que valora la
actividad y la producción.
Encarnar el Divino Femenino es corporizar también esta
nada y estar en paz con ella como una parte de los ciclos de existencia. No
teman estar “bloqueados” o “estancados”, o ser un
fracaso. Es simplemente el tiempo en el que estás Siendo el Vacío para poder
facilitar el nacimiento de algo nuevo hacia la Luz.
El ser capaz de sostener este Vacío en equilibrio con la
Creación y la Manifestación es el trabajo de la Gran Madre Cósmica. Sostener
esa energía dentro de ustedes mismos es encarnar a la Gran Madre Cósmica.
Como la Encarnación del Divino Femenino, ustedes están
facilitando el Balance de toda la vida en la Tierra. También se convierten en
Quan Yin, el conducto para el Amor y la Compasión, y el puente de la energía
que ama y nutre a todos los seres vivos.
Amada Familia de Luz, mientras ustedes encarnan esta
energía Divina Femenina, están ayudando a sostener, amar y renacer a la Tierra.
Este es el secreto final del Misterio de los Códigos del Grial, la renovación
de la vida y del amor en una Nueva Era a través del proceso Alquímico de la
Sagrada Unión interna. Es una unión interna profunda de todos los aspectos del
Sí Mismo, transmutando las viejas energías en la Nueva Luz Diamante Cristalina.
Mientras ustedes encarnan a la Gran Madre, se convierten
en el Grial, o el Cáliz para la Luz Diamante. Fluye desde ustedes hacia la
creación de una Nueva Tierra y una Nueva Realidad. En el momento correcto, el Masculino
Divino dará un paso adelante para manifestar esta Nueva Realidad en la Forma
Material. 
