MENSAJE
DE MADRE TIERRA
Ya
estoy en una nueva fase de mi ascensión
Por
María Ruso-Adehenna
26-3-2015
Amada
hija, amados hijos, les habla vuestra Madre tierra, me presento ante ustedes,
para comunicarles, que ya he pasado mi
tercer anillo en el cinturón fotonico.
Es
un placer estar aquí, en estas
dimensiones elevadas, y con mucho animo de alegría, aunque
el pasaje, es cada vez mas difícil, porque el tiempo es menor, y el cuello de botella del anillo
es angosto, mi viaje se torna mas ligero
y abrupto. Mis movimientos deben ser precisos y certeros, la duración de cada etapa es menor y la adaptación a los cambios de encontrarme con paisajes nuevos, y danzar a mayor velocidad, porque así lo requiere esta aventura
fascinante.
Todo
aquí es cambiante, pero se que llegara
el tiempo de reposar y disfrutar de las maravillas que me van anunciando.
Este
cambio es planetario, también
todo el universo esta inmerso en
esta transformación, que parece no tiene limites. Mi próximo paso es de
luz absoluta, ya mi corazón es de
cristal diamante, es muy bello, desde el, puedo ver increíbles facetas de lo
que me convertiré.
Por
momentos las elevadas praderas verdes llenas de flores silvestres se
presentan como un cuadro
que solo cabe en la imaginación, todo perfecto y sublime y de golpe se
transforma en las mas nevadas cumbres
que brillan con el reflejo del sol, los
mares y ríos cristalinos y puros sin ningún
reflejo de daño alguno, toda la fauna y vegetación marina viviendo en su mayor esplendor.
Les
puedo decir, esto es soñado!!!
En Perfecto orden
y armonía.
Mi
precioso corazón de diamante me regala tan
bellos momentos, y me dan fuerzas para continuar.
Aunque
afuera en mi corteza, parece que todo esta al revés, mis amados
hijos, esta purificación es sumamente necesaria y les aseguro que lo
estoy haciendo con el mayor cuidado.
Hoy
más que nunca estén arraigados a mí, mi corazón
diamantino no es solo mío, es de vosotros también. Mi luz es vuestra luz, y juntos nos ayudamos instante a instante.
El
anclaje a mi, es el eslabón clave, para
que juntos ascendamos un nuevo nivel de vibración.
En
los amaneceres, con varias respiraciones profundas y suaves,
vuestra conexión será instantánea.
Visualicen un
cristal transparente brillante en
las entrañas de mi ser, los estaré aguardando con mucho amor, y desde vuestro corazón imaginen lazos de amor que se extienden y llegan
al mío. Una ola de luz les será enviada,
vean, perciban con tranquilidad, como se expande y los envuelve, las partículas diamantinas harán el trabajo, de conversión.
Una
unión de corazón a corazón.
Les
recuerdo amados hijos, que son inmensamente amados, al igual que cualquiera
de mis niños, que veo nacer hoy,
crecen y se desarrollan pero que ya
llevan impreso un nuevo patrón de frecuencia.
Se que les cuesta a muchos verme como un
ser vivo, pero como el canto de los pájaros, que es real, canto todas
las noches y las madrugadas anunciando mis próximos, pasos a seguir.
(Si,
Madre tierra, te escucho todas las
noches y escucho tus alegrías y tus lamentos con mi
cabeza apoyada en mi almohada, cuando no
te escucho es que algo pasara cerca, y
si oigo tu sufrir, en algún lugar lejano te estas moviendo, y esto no es una metáfora).
Lo
recuerdas hija, los antiguos, escuchaban
con el oído puesto en mi suelo, podían conocer mis secretos, los animales lo saben y huyen
lejos, y los antiguos
preparaban sus cosas y partían para poder resguardarse. Sus alimentos
salen de mí ser, y me daban las gracias.
Quizás
en algunos lugares, todavía esa conexión
no se perdió, los nativos la llevan
en sus consciencias.
Esa
conexión que existía, ya no esta arraigada, lamentablemente la ilusión los alejo,
y la única conexión mas cercana
es el servicio meteorológico, y se da por sentado que mi trabajo es proveer.
Pero como ha pasado mucho, mucha agua debajo del puente,
todo vuelve a su cause normal, y mis ríos
están demostrando cual era su verdadero
origen, mis vientos están arrasando con
todo a su paso, mis nevadas están
preservando y congelando la vegetación primaria. El fuego seco y el calor se deshacen de aquello que no es productivo. Pero debajo
de mi suelo están las semillas nuevas
intactas, para el nuevo amanecer.
Todo
estará en equilibrio pronto, no lo duden.
Amados
hijos, me despido, los amo y espero en mi corazón.
Yo soy Madre Tierra.