REENCUENTRO...
REENCUENTRO
En
ocasiones existen hilos invisibles que nos conectan de manera especial con
determinadas personas. Puede que apenas tengamos relación con ella, o que solo
la hayamos visto en contadas ocasiones... Sin
embargo, nuestro Ser reconoce instantáneamente algo en esos ojos, en esa
mirada, en esa voz, en esa presencia...
Por un momento todo
cambia y nos sentimos transportados a otra dimensión, sin saber muy bien qué
está ocurriendo o el porqué de nuestras reacciones. Aunque el ego desee
interferir y racionalizar el encuentro, no hay racionalización posible: la
sensación no engaña; el Ser no se equivoca.
Definitivamente hay
"algo" en esos ojos. Una luz reconocible y familiar. Y esa otra
persona, aun callada, nos habla con su esencia. Nos confirma que
"sí", que no nos equivocamos. Sus ojos físicos parecen mirar a otra
parte, pero los ojos de su alma permanecen absortos en los nuestros.
No se trata de un
simple encuentro, sino de un reencuentro.
Tal vez un
reencuentro fugaz, de solo unos segundos, pero reencuentro al fin y al cabo.
Luego vendrá el tiempo, y el ego, y la rutina de la vida... Los
"formalismos". Pero irremediablemente queda "algo" en
nosotros. Sabemos (nuestra alma lo sabe) que no fue casual. Y que, por más que
deseemos ver una luz idéntica en los ojos de otra persona, nada volverá a ser
lo mismo.
Quizá en otra época
o en otra dimensión... Quizá en esta misma vida.
Pero ambos, sin
importar el camino que hayamos decidido tomar, sabemos que volverá a producirse
el reencuentro.
Tomado de:
complementosdivinos.blogspot.com