AA. Mikhael - 11/12/2019
Yo soy el Arcángel Mikhaël, Príncipe y Regente de las Milicias Celestiales. Acoged mi Fuego y mi Espada, reciba en su corazón la presencia del Cónclave arcangélicos y la Comunión del Espíritu Micaèlico.
Acoged en silencio durante unos instantes la Llama del Amor Sagrado, el Fuego Divino de la Verdad en su templo.
La hora ha sonado por el despertar de la humanidad. La hora ha llegado para la manifestación del Espíritu de Verdad. Es la hora de la transformación de la carne y de la Resurrección en la Nueva Vida.
Los códigos y hebras del ADN dormido despiertan y se desarrollan, reconstruyendo su casa de Eternidad. Tal y como os ha descrito el comandante de los Ancianos, la semilla de la Nueva Vida ha hecho raíz, y la raíz de la Nueva Vida pone las bases, los fundamentos y da la fuerza de crecimiento para el desarrollo de la Luz, la Verdad y el Amor en este sistema solar y en la Madre Gaia.
El sol se prepara para actualizarse con el nuevo patrón frecuencial que le dará un nuevo espectro luminoso y vibratorio. El sol es el representante de Cristo, del sol negro desconocido que es el origen de la Luz. El sol que ve, que es miles de veces inferior en radiación respecto a sus ancestros, ahora se dispone a renovarse y a entregar a todo el sistema solar los nuevos patrones que prevalecerán en el desarrollo unitario, bajo la dirección de la Fuente, del nuevo viaje del sistema solar.
La Tierra se remueve y se posiciona para recibir, para acoger el estallido de vida que provocará su expansión, su dilatación y le dará un nuevo ritmo, una nueva velocidad.
Hacemos comunión en el silencio, en la Paz que se instala, en la Paz que le regala la presencia del Espíritu de Verdad. Sois lo que sois desde el inicio.
Usted es el Amor, la Verdad y la Vida que dan origen a toda expresión, a toda creación.
El Espíritu os viene a llamar Uno a Uno para inscribirse en el Libro de la Vida, aquel que no tiene páginas ni letras, aquel que sois vosotros mismos y todos los multiversos.
La redención colectiva de la humanidad está en vuestras puertas. Las reacciones de violencia, de protesta, de descontento reflejan el estado de impotencia y de ignorancia en el que el hombre ha vivido durante muchos milenios. Los poderes de las tinieblas han controlado y manipulado la humanidad, robándole la Verdadera Vida y conduciéndola por caminos adversos, allí donde la muerte provocada por el árbol del bien y el mal, corrompe y deforma la Vida que le facilitaron la Madre Divina.
Cuando el Hijo del Hombre se manifieste con todo su esplendor y gloria Celestial, los hombres caerán de rodillas, no reconocerán sus obras, descubrirán la vanidad, la futilidad, la angustia, el orgullo y el miedo que les han dirigido por los caminos de perdición, de separación con la Fuente y con el Amor Divino.
Los padecimientos y sufrimientos que caen ahora sobre toda la Tierra son el ojo que abre la ventana a la Verdad. La dura apariencia no es más que el tierno aguijón de la Espada del Espíritu Micaèlico y del Espíritu de Verdad.
Ponga la humildad a su base, en el Triángulo de Fuego del Sacro. Ponga la ternura, la dulzura en el Corazón Radiante. Ponga la "Sophia", la Sabiduría Divina, la Luz que todo lo esclarece a la Corona del Cabo.
Los instantes intensifican, los vientos soplan y barren con fuerza toda la Tierra. Las aguas limpian y pasan por todos los lugares donde deben pasar. Los elementos que circulan preparan el camino para la emergencia global de la sangre y el fuego de la Tierra, la apertura de las puertas del Intraterra y la modificación de las placas tectónicas.
El Amor Divino se derrama y la Tierra aumenta su temperatura al igual que le sucede a todos vosotros. La Tierra deshace el hielo de los polos, acompaña en el encendido del Fuego Divino. Su vida pasará de este estrato que ha conocido de 3ª dimensión a la vida etérea de 5ª dimensión.
La Nueva Tierra será la base y el cristal de Sirius en este sistema solar, permitiendo la expresión libre y Una de la Vida, participando en la vida multidimensional.
La acogida, la paz, la humildad y la ternura son virtudes esenciales para vivir estos tiempos. Permita que la Fuerza del Espíritu os atraviese, que todo lo que se le presente en su día a día sea acogido en el Corazón Divino y entregado a la Inteligencia de la Luz.
Las Puertas del Cielo se abren y los diferentes colectivos planetarios, de varios sistemas estelares están a su alrededor para acompañaros, para sosteneros.
La redención, la ascensión y la liberación de la Tierra expresan un momento álgido para toda esta galaxia y el universo local. El establecimiento del Nuevo Cielo y la Nueva Tierra se realiza ahora día a día en su interior. Ha crecido hasta convertirse en el Árbol de la Vida y sus frutos están madurando.
Sed pacientes, absorbe en el Amor todo lo que pasa a su alrededor. Fecunda todo con el Agua de Vida y ofrecéis por su silencio, por su verbo, por su presencia, la Luz que te devuelve a la Verdadera Esencia; acogiéndola en la paz, la armonía y la serenidad.
Rechazar las informaciones provenientes de la logia negra que buscan introducir el miedo y la duda. No haga caso de fechas de calendario ni de anuncios de eventos repentinos que puedan irrumpir de un momento a otro. La mayoría de estas informaciones juegan con la buena fe, con la buena disposición de muchos hermanos y hermanas que se encuentran en proceso de apertura y descubrimiento.
Sabéis que la ascensión planetaria no se producirá hasta que aparezcan señales inequívocas y bien visibles en su exterior. Vivid un proceso progresivo donde los diferentes elementos irán aumentando de intensidad hasta llegar al cambio dimensional. Por tanto, no se deje llevar por la angustia, por la ansiedad ni por todos estos anuncios que no tienen una orientación adecuada.
Escucha pues tu Corazón Dorado y Sagrado, escucha la voz de su Ángel Solar, la presencia del Espíritu Micaèlico y de todos los hermanos, maestros, rishis y grandes guías de la humanidad que velan por su redención, ascensión y liberación en el camino designado por el Padre Celestial y la Madre Divina.
Estas son nuestras palabras, las palabras del Espíritu Micaèlico que juntamos a la presencia del Cónclave de los Melquisedec y a diferentes colectivos provenientes de esta galaxia.
Yo soy el Arcángel Mikhaël, Príncipe y Regente de las Milicias Celestiales. Os emplazamos, yo y el Espíritu Micaèlico, a recibir los últimos Bautizos de Fuego y hacer nacer, en la raíz de su templo, el Cristo que eres: la Libertad Absoluta, en todo espacio y tiempo, de manifestar el Amor, la Vida y la Alegría.
Sea pues los Árboles de la Vida preparados para dar el fruto, el más suculento, el más dulce.
Yo soy el Arcángel Mikhaël, Príncipe y Regente de las Milicias Celestiales. Os doy mi Fuego, os ofrezco mi espada y mi lanza en todo momento para establecer definitivamente el pacto y el tabernáculo de la redención.
Que así sea en todos los Hijos del Sol, en todas las Hijas del Sol que acojan la Verdad Última de la Presencia Micaèlica.
Transmitido por Silah Pere Sicart
Original en Catalán
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