Posted: 12 Jul 2015
Académicos de la Universidad de Chile publicaron el artículo científico “Probing large intraplate earthquakes at the west flank of the Andes” (Sondeo de grandes terremotos intraplaca en el flanco oeste de los Andes), en el que se daría cuenta que la Falla de San Ramón estaría lista para desencadenar un terremoto de gran magnitud.
El profesor del Departamento de Geología, Gabriel Vargas, la profesora Sofía Rebolledo y profesionales de nivel mundial, comprobaron que la esta falla está activa, según se explica en el sitio de internet de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de esta casa de estudios.
El estudio se basó en analizar las evidencias de los últimos movimientos telúricos en
esa falla, por lo que los académicos se enfocaron en la zona del borde
oriente de Santiago, en donde el mayor problema fue la urbanización que
presenta la zona, situación que obligó a los profesionales trasladarse a
un sector de la quebrada de Macul.
“Lo
que hicimos ahí fue realizar unas excavaciones o trincheras
paleosismológicas, unas zanjas de 5 metros de profundidad máxima por
unos 30 a 40 metros de largo y 4 metros de ancho- y en esas zanjas
pudimos observar la falla y cómo ésta afectó sedimentos que conforman la
superficie del valle de Santiago”, explica el profesor Vargas.
De acuerdo a los aspectos analizados, las observaciones dieron como resultado que en la Falla de San Ramón existieron dos eventos importantes durante los últimos 17 mil años, el más reciente hace 8 mil años.
“Ha generado por lo menos dos terremotos de
magnitud 7,5 en los últimos 17 mil años, y el último ocurrió hace unos 8
mil años. Entonces, de acuerdo a estos antecedentes, la falla estaría
lista para generar un nuevo terremoto de gran magnitud”, precisa el investigador de la Universidad de Chile.
Hace
tres años aproximadamente, la Seremi del Ministerio de Vivienda y
Urbanismo realizó un estudio que dio como resultado que la falla podría
un megaterremoto en cualquier momento.
“Invitamos
a especialistas de nivel mundial en paelosismología y en geocronología,
que inmediatamente se interesaron al apreciar la relevancia de las
observaciones realizadas en las trincheras”, dijo Vargas.